Fuente: The Department of Health
Investigadores evalúan los efectos que produce la deficiencia de vitamina D de mujeres embarazadas y en lactancia en sus hijos.
MedWire News: Las mujeres embarazas y en período de lactancia deberían aumentar su ingesta de vitamina D durante los meses de invierno para prevenir que sus hijos desarrollen raquitismo y convulsiones, de acuerdo con los hallazgos provenientes de un informe del Departamento de Salud del Reino Unido.
Los profesionales del ámbito medico están diagnosticando cada vez más deficiencia de vitamina D en los niños. Esto puede causar convulsiones y raquitismo, comentan los investigadores.
Los niños de las minorías étnicas podrían estar en riesgo aún mayor, dado que la piel más oscura absorbe aún menos luz solar, agregan.
Durante los meses de verano, una exposición al sol de 15 minutos crea suficientes cantidades de vitamina D en el organismo. En invierno, los alimentos tales como el aceite de pescado, los huevos, cereales fortificados y el pan pueden restaurar parte de las reservas de vitamina en el cuerpo. Pero los niveles de vitamina D proporcionados por estas fuentes alimenticias podrían ser inadecuados para las mujeres embarazadas y las que están amamantando.
Éstas y sus hijos menores de 4 años de edad podrían beneficiarse de tomar un suplemento con 10 microgramos de vitamina D, sugiere el informe.
Colin Mitchie, un pediatra del Ealing Hospital de Londres, R.U., dijo: “La mayoría de las mujeres embarazadas y en lactancia deberían tomar un suplemento de vitamina D para asegurar que sus bebés tengan el mejor comienzo de vida”.